Francisco Suárez Hernández y Francisco Suárez Armenta, (University of British Columbia, Sauder, Clase del 2025)
Pancho & Pancho
Después muchas horas de convivencia y conversaciones muy interesantes con mi hijo mayor Pancho, en las últimas semanas durante su break de la universidad; me estuvo actualizando de muchos temas que verdaderamente me motivan. Como enterarme que existen universidades y carreras en Canadá, enfocadas en negocios que incluyen en sus materias base, clases como silvicultura, que se enfoca en negocios sostenibles, en bosques, pesca, legislación ambiental y reforestación. Así como en la industria de la madera sostenible, la cual representa una de las principales industrias de Canadá, y es un gran exportador de madera. Sólo en el año 2020, se aprovecharon alrededor de 716,000 hectáreas de bosques en Canadá, lo que corresponde al 0.2 % de la superficie forestal.
La generación de valor económico, social y ambiental
La opción de concentración de sostenibilidad que está emprendiendo, es otro ejemplo que ya empiezan a integrar de una manera MUY amplia la generación de valor económico, social y ambiental, que incluye materias como innovación y sostenibilidad, estrategia para empresas responsables, inversión de impacto: finanzas sociales en el siglo XXI, pueblos indígenas y desarrollo económico, marketing social y sin fines de lucro, marketing sostenible, emprendimiento social, sostenibilidad por diseño, ciudadanía global, energía sostenible: política y gobernanza, economía del medio ambiente, “shopping-compras, sociedad y sostenibilidad”.
Durante la plática fue increíble escuchar el interés y energía de Pancho en aprender las estrategias que se están siguiendo para proyectos en Norteamérica respecto a temas de inversión en agricultura regenerativa, waste management, optimizar la agricultura y para empezar a entender mejor el concepto que podría sonar imposible pensar en utilizar madera sin dañar el medio ambiente, partiendo de la pregunta:
¿Cómo está cosechando madera de forma sostenible?
Y la fórmula mágica, es mediante una gestión forestal sostenible, que tiene en el centro mantener y mejorar los indicadores económicos, sociales y ambientales, a favor de los bosques en beneficio de las actuales y futuras generaciones. El reto y como se organiza el esfuerzo, es conservando la biodiversidad, cuidar la salud de los bosques, de la mano con el cumplimiento del nivel de requerimientos y suministro de los productos derivados de la madera.
Todos los bosques de Canadá se gestionan bajo principios en indicadores de la gestión forestal sostenible y en seguida les menciono los principales para que tengan una mejor idea, de que estoy hablando:
Área forestal aprovechada: tendencia anual aprovechada en tierras privadas y públicas, donde el indicador integra el nivel de actividad industrial, considerando las áreas totales de bosques en Canadá y evalúa la sostenibilidad a largo plazo del sector forestal.
Regeneración forestal: es la unidad de medida de superficie sembrada y la proporción de número de plántulas sembradas en tierras públicas y privadas. Integra el monitoreo de las actividades y programas de regeneración, para asegurar que las áreas aprovechadas, vuelvan a crecer como bosques, zonas productivas de maderas y se logre mantener servicios ecosistémicos. En resumen, son técnicas para asegurar mantener la densidad de árboles por zonas.
Volumen cosechado con relación al suministro de madera sostenible: integra información clave sobre la cosecha anual, comparado con el suministro para asegurar el balance sostenible de la cosecha. Básicamente, este indicador es para garantizar que el volumen de madera cosechada se mantenga en niveles sostenibles.
Estos indicadores son sencillos de explicar, pero un gran reto asegurar que se mantengan y arriba de eso, tenemos que considerar que la velocidad y la escala del cambio climático pueden hacer que los bosques de Canadá sean vulnerables; por lo que se tiene que estar actualizando con el apoyo de tecnología y nuevos métodos de conservación de manera permanente.
Una educación, una mentalidad y una cultura de acciones sostenibles de todos, generaciones actuales y futuras para México:
Durante los años he tenido la oportunidad vía el World Environment Center en participar en talleres en la Universidad de Stanford con la escuela de negocios, para buscar diseñar los programas educativos del futuro integrando la sostenibilidad. También la gran experiencia vía el Tec de Monterrey en diferentes foros, congresos, proyectos y trabajar con el EGADE, para que cada vez se ve más verde la agenda verde en sus programas y podría dedicar muchas columnas más hablando de emprendimiento sostenible vía Enactus, Programas de Liderazgo del Fondo Mexicano de Conservación de la Naturaleza, Fundación ILAN, y The Green Board. Aunque ya contamos con cientos de programas en México que están cambiando el rumbo a favor de planeta, requerimos millones más de ellos para revertir la tendencia en la lucha contra cambio climático.
Justo los futuros líderes, de todos los sectores si desde su formación en kínder, primaria, hasta educación superior y posgrados, empiezan a integrar la generación de valor económico, social y ambiental en algo tan común como es el retorno de inversión de un proyecto; realmente empezaremos a mover el balance a favor de una lucha que al momento vamos perdiendo.
Lo MÁS importante es la educación y sumar a las generaciones actuales y futuras en un camino que siempre debe ser pensando en:
“Dejar en mejor estado mi comunidad y mi planeta del estado en que yo recibí”
Y así, habremos aprendido de una simple lección con la madre naturaleza y que con nuestro planeta que es nuestra casa, No se juega. Canadá puede pensar y actuar en favor de nuestro planeta y México también puede. El planeta aquí estará en millones de años más, lo que está en juego somos los humanos que venimos a ocupar este privilegiado espacio y planeta tierra.
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